Dato orientativo. Recuerda que el nivel de dificultad depende de muchos factores.
Salimos desde Covanera, desde aquí nos acercaremos al Pozo Azul, la cueva de espeleobuceo más grande del mundo, con sus 14 km. de galerías, desde aquí hasta San Felices del Rudrón, aquí pasaremos por la piscifactoría en dónde tomamos el desvió hacia la derecha, junto al río. Una subida hasta la parte alta de los riscos. Las vistas son preciosas.
Bordeamos todos los riscos hasta ver la ermita de Santa Cetola y Elena en Valdelateja, descendemos a ella por su camino empedrado desde dónde subiremos hasta la ermita, una vez disfrutado de las bonitas vistas que se disfrutan desde allí descenderemos hasta Valdelateja.
La vuelta la hacemos al lado del rio Rudrón, más corta y sin tantos desniveles, dónde disfrutaremos de sus cristalinas aguas, su bosque de ribera y sus saltos de agua. Un relajante paseo de vuelta hasta Covanera.
Un paisaje espectacular, todo ello dentro del Parque Natural Hoces del Alto Ebro – Rudrón.
Asegurada e incluida. Te llevamos y te traemos en autocares propios.
Nacionales e internacionales. Profesionales y con todas las garantías.
Una empresa inscrita, responsable y en regla con guías oficiales.
1º Plz Zorrilla (Para de Bus)
2º Feria de Muestras (Puerta Acceso)
Plaza Zorrilla: 7:15 AM
Feria de Muestras: 7:30 AM
Respeto absoluto a la naturaleza y al propio entorno. Es recomendable preparar la ruta para disfrutar en mayor media del entorno natural y comprobar el nivel de dificultad de cada marcha.
Importante disponer del equipo adecuado. En invierno es esencial ir bien abrigado, y vestido por capas para facilitar el quita y pon de la ropa, en verano es muy conveniente llevar protección solar, gafas de sol y una visera o similar para evitar insolaciones. Nunca está de más llevar alguna prenda impermeable para protegerse de la lluvia y contar con un calzado idóneo para el terreno, así como un segundo par en caso de posible barro y evitar suciedad en el bus.
El agua y la comida nunca deben faltar. También es recomendable prestar atención a los manantiales, y sólo fiarse de aquellos que estén señalizados con el letrero de agua potable. Para respetar el entorno y la naturaleza del lugar es obligatorio llevarse la basura generada para mantener limpio el monte.